
Robert Prevost ha escogido el nombre de León XIV y, con ello, ha hecho que todas las miradas se posen sobre León XIII. ¿Quién fue León XIII? ¿Qué dice la elección de este nombre por parte del nuevo pontífice? Un dato interesante para la gran Familia Teresiana es que fue el Papa que lideró la Iglesia durante la época de madurez de Enrique de Ossó, así que, de su mano, vamos a descubrir quién fue este Papa y por qué fue relevante en la historia de la Iglesia y de la humanidad…y, de paso, vamos a descubrir qué relación tuvo con Enrique de Ossó.
“Lloramos la muerte del más amado de los Padres, Pío IX el Grande, por espacio de quince días; gemíamos en orfandad los hijos de la Iglesia, y el Señor en su misericordia nos depara otro Padre bondadoso, prudente, sabio esforzado, que viene a continuar gloriosamente la obra empezada por su digno predecesor. Este Padre bondadoso llámase León XIII. Bienvenido, bienvenido a la silla de Pedro tan valeroso Padre, y el Señor le de su gracia copiosísima para ver el triunfo de la Iglesia preparado por su predecesor, de feliz memoria. Oremos entre tanto sin intermisión por tan bondadoso Padre.” (Viva el Papa, viva el Papa León XIII)
Estas fueron las palabras que pronunció Nuestro Padre al enterarse de la elección del nuevo Papa. León XIII fue Papa desde 1878 hasta 1903, una época fuertemente marcada por la revolución industrial que presagiaba el inicio del nuevo mundo moderno. De carácter intelectual y activo, el Papa León XIII mostró siempre un gran interés por comprender el mundo cambiante que le tocó vivir. Su legado más representativo es la encíclica Rerum Novarum, que constituye el primer documento oficial de la Iglesia en materia social; un documento en el que se abordan temas como la dignidad del trabajo y del trabajador; el derecho a la propiedad privada; la importancia del salario justo o la necesidad de que la Iglesia y las asociaciones obreras empezaran a actuar de manera organizada como agentes promotores del cambio.
Esta encíclica vio la luz cuando San Enrique tenía 51 años y un deseo grande de comunicar a Dios a todos, sin importar su condición social o económica. Atraído por el carácter social de esta nueva encíclica, profundamente convencido de que debía darla a conocer a cuantos más, mejor, en cuanto termina de leerla, San Enrique redacta el “Catecismo de obreros y de ricos”, una obra concebida como respuesta pastoral a la encíclica Rerum Novarum. El objetivo de este catecismo era fomentar el entendimiento mutuo y la responsabilidad compartida entre las clases sociales, promoviendo una sociedad más justa y solidaria.
El catecismo presenta, en formato pedagógico, a través de preguntas y respuestas, los principios fundamentales de la Rerum Novarum, adaptados para una comprensión accesible a todos. He aquí un ejemplo de ello:
-¿Qué ha hecho el sapientísimo León XIII en vista de esta guerra? –Proponiéndose como fin la defensa de la Iglesia y el bien común y para refutar opiniones engañosas, como otras veces, ha escrito su admirable Encíclica, acerca del estado y condición de los obreros, de la que se ha formado este Catecismo.
-¿Cómo trata nuestro sapientísimo padre León papa XIII esta cuestión? –No como otras veces de un modo incidental, sino de propósito y por completo.
-¿De qué manera? –De manera que se vean bien los principios que han de dar a esta contienda la solución que demandan la verdad y la justicia.
-¿Es difícil de resolver esta contienda? –Sí que es difícil y no carece de peligro.
-¿Por qué es difícil? –Porque difícil es dar la medida justa de los derechos y de los deberes en que ricos y proletarios, capitalistas y operarios deben encerrarse. (Catecismo de los Obreros y de los Ricos)
¿Qué opinaría San Enrique del nuevo Papa León XIV? Nunca lo sabremos. Pero conociendo lo que opinaba de León XIII, cabe especular que hoy esté sonriendo desde el Cielo.