
Uno de los objetivos de la Reunión Intercapitular era discernir conjuntamente, a partir de la opción capitular y del contexto actual, el desafío o acento que como Compañía acogemos propuesta que oriente nuestras miradas, esfuerzos y el compromiso durante los próximos tres años.
Previamente a la reunión, el trabajo realizado en todas las provincias y en el nivel general para evaluar el trienio que terminaba, fue una confirmación de la gracia que como Compañía recibimos al definir la OPCIÓN CAPITULAR que se concretaba en tres invitaciones.
La invitación segunda del documento capitular, iluminó especialmente la reflexión, trabajos y diálogos, y fue vislumbrándose como la llamada concreta que acogemos como don del Espíritu.